De los que no se olvidan
Un sueño hecho realidad
Como cualquier azar de la vida,
llegaron a tus manos dos hueveras,
y la niña que todos llevamos dentro,
deseo coleccionarlas.
Tu madre siguió tu sueño
y dos que en casa tenía
te regaló para continuarlo.
Tuviste la gran suerte
De tener a tu lado,
una persona que te amaba,
y tu sueño quiso que alcanzaras.
Viajes, regalos, amigos y conocidos,
hueveras te regalaban,
pues era lo único con lo que sabían
que no se equivocaban.
Como el mejor amante de este sueño
comenzaste otro sin pensarlo,
catalogando y ordenando cada una de ellas
en un cuaderno.
Sin pensar conseguiste algo más valioso
que la propia colección,
coleccionar libretas escritas y pintadas
por tu propio corazón.
Llegaste a un número muy alto, ¡6999!
y a tu hija comentaste
"me falta una para las 7.000"
y no te diste cuenta
que un ángel
lo estaba oyendo
y le pidió a la profe que con arcilla
una huevera quería hacer.
Terminada, te la entregó.
Y ahora ya acabaste la colección
con un broche de oro,
porque creo yo que no me equivoco
si digo lo que para ti tiene más valor
Por último, amiga mía te deseo
de todo corazón,
que disfrutes de la vida y de tu colección,
pues poca gente puede decir
que convirtió su sueño en realidad,
y eso, tú, sí.
Con todo corazón te deseo ser feliz,
y disfrutar de tu ilusión.
Gracias, Ester, de todo corazón