Nº. 1.800 |
Cuando hicimos la exposición de hueveras en casa, el año 2000, vino a visitarla una compañera de trabajo de Luis con su familia. Ambra era su hija, por aquél entonces una niña muy simpática (seguro que ahora sigue siendo muy simpática, pero ya no será una niña), que nos contó que lo que a ella de verdad le gustaban eran los delfines y que también hacía colección. Pasados los meses de verano, en septiembre, Ambra nos hizo llegar su regalo, una huevera muy bonita que no sé dónde compró, pero creo que fue en Italia.
Se trata de una pieza de madera muy ligera y de forma común, con el pie pintado de color azul oscuro y el interior del cuerpo lacado de color amarillo. En el exterior de ese cuerpo, se ve una franja de color azul de color azul celeste, que está delimitada por don franjas blancas sobre las que aparece una cenefa de espirales en color negro. Y sobre la parte azul celeste, que representa el mar, se ven nadando plácidamente seis delfines.
No hay comentarios:
Publicar un comentario